El fin de año es una oportunidad que aprovechan varias familias para encontrarse. Muchos hijos que estudian y viven lejos de la casa paterna, visitan, en este tiempo, a sus padres. La alegría de los niños que quieren mostrarle sus regalos de Navidad a todos, llena la casa. Es la hora de mirar retrospectivamente los meses pasados y emprender el año entrante llenos de esperanza.
Las Hermanas de María de Schoenstatt en Brasil se encontraron también, como Familia, a fin de año. Muchas de las Hermanas que trabajan en el nordeste de Brasil y en diversas diócesis del sur de Brasil viajaron a Santa Maria para participar de una jornada formativa en la Casa del Movimiento a la sombra del Santuario Tabor.
“Estos encuentros son muy importantes para una comunidad como la nuestra, que se ve a sí misma como una gran Familia. Las Hermanas jóvenes y mayores compartieron la alegría de haber vivenciado el quincuagésimo aniversario del fallecimiento de nuestro Fundador, Padre José Kentenich, y haber comenzado los preparativos para el centenario de nuestro Instituto que se celebrará en el año 2026”, explica la Hna. M. Lillian Goerck, quien coordinó este encuentro.
El año entrante 2019, el primero en preparación al jubileo de las Hermanas de María, es para nosotros un año especial: también se celebrarán los 70 años de la coronación en el santuario Tabor, ocasión en la cual el Padre Kentenich nombró a la Madre y Reina como Reina de la filialidad heroica.
La Hermana M. Rosangela cierra con las palabras: “Llenas de confianza inquebrantable en la Madre y Reina nos disponemos a asumir los desafíos y las gracias que Dios nos quiera regalar, comenzando así nuestro camino hacia el centenario de la fundación de nuestro Instituto.”